Periodistas, búlgaros y rubias

TITULO: PERIODISTAS, BÚLGAROS Y RUBIAS

AUTORA: BLANCA ÁLVAREZ

ILUSTRADORA: JUDY KAUFMANN

EDITORIAL: PLANETA, S.A.

RESUMEN:

                     En marzo de 2006 mandan a un periódico deportivo de Madrid una nota en la que pone que han secuestrado al futbolista Pichi, del Madroño Club, y piden un rescate de 10 millones.  El Madroño club elige a Camila, reportera del periódico,  para trabajar en la investigación, junto al inspector de policía Aguadillas, por ser la cotilla oficial del fútbol. Lo único que saben de Pichi es que después del entrenamiento había ido a recoger a una prima lejana que llegaba de Córdoba y que su coche había aparecido abandonado con olor a cloroformo en su interior.

Camila va a hablar con Campanilla, un amigo exboxeador que se mueve por barrios bajos, ya sabía lo del secuestro y le contó que era cosa de la mafia búlgara.

Después fue a visitar a Burgos, presidente del Madroño Club, también conocía la noticia porque había recibido una nota igual. Habló con dos jugadores: Dieguito y Molinero, lo único que pudo sacarles fue que Pichi tenía una crisis de fe, Camila se quedo con la duda de que algo más sí sabían y de que realmente a Pichi lo hubiesen secuestrado.

Le contó a su jefe, R.A., que estaba asustada porque la mafia búlgara estaba metida en el asunto, en ese momento recibieron una llamada diciendo que el futbolista Molinero estaba en el hospital por una paliza que había recibido y que había pedido ver a Camila.

Camila fue al hospital junto a Campanilla y Rafa, su hijo, que se habían ofrecido para ser sus guardaespaldas y la mujer de Molinero le entregó su correspondencia, encontró una carta escrita por Pichi en la que ponía que se marchaba por motivos espirituales.

Camila recibió amenazas y ataques de los búlgaros, para que dejaran de meter las narices y entregarán ya el dinero del rescate, le pidieron una prueba de que estuviera vivo y a los días recibieron una oreja, comprobaron su ADN y no era de Pichi.

Camila y Núñez realizaron un viaje a Córdoba para visitar a la madre de Pichi,  les contó que Pichi estaba en un monasterio meditando para hacerse monje a causa de una ruptura con una modelo. Que el día de su desaparición ella le había mandado a Loli, una guapa chica de Córdoba para ver si cambiaba sus ideas.

El entrenador del Madroño Club, Iván Vladipov, les pidió que fueran al monasterio a convencerle a Pichi para que saliera de allí y así lo hicieron. Le contaron  lo sucedido y aceptó a marcharse con ellos.

Todo había terminado, a la mafia búlgara la detuvieron gracias a las declaraciones del Tuerto que había hablado después de que le cortaran la oreja y Camila tuvo la mejor exclusiva para el periódico: La boda de Pichi y Loli.

                                               Elisabeth Palacios Ortiz. 1.ESO.B